Informe de investigación sobre los polizones
Un informe de investigación basado en entrevistas que registra el lado desconocido de la vida de los polizones, una minoría marginada en Colonipenal.

Parte I

Un estudio sobre la vida "cotidiana" de los polizones
Este libro pretende que la percepción pública de los polizones pase de la mera condena a una mirada más centrada en su vida cotidiana. El autor trata de fomentar la comunicación entre los grupos para encontrar nuevas soluciones al eterno problema de los polizones, que abarca varias Eras del Ámbar.

Nota: Este informe investiga únicamente a los seres orgánicos y a los intelitrones que entraron en el paisaje onírico sinestésico por medio de naves estelares vecinas sin la debida autorización del Hotel Fantasía.

Capítulo I: Hasta los polizones tienen que trabajar

Los polizones de galaxias más pobres suelen gastar todos sus ahorros para embarcarse en naves interestelares. Se esconden en cabinas rudimentarias, eluden la vigilancia de La Familia y logran entrar al paisaje onírico.

Contrariamente a la percepción popular, los polizones desempleados representan solo una pequeña proporción de todos ellos. Ante la presión por sobrevivir, la mayoría de los polizones intentan encontrar trabajo en Colonipenal. Aunque la búsqueda suele ser difícil para estas personas tan marginadas, pueden ganarse el sustento en el próspero paisaje onírico con un trabajo sencillo.

Mientras tanto, los polizones desempleados tienen sus propios medios de supervivencia alternativos, suelen dividirse en grupos más pequeños, y su experiencia no difiere mucho de la mendicidad. Emplean diversas técnicas para mendigar alfalflorines a los huéspedes en el paisaje onírico de Colonipenal y usan el dinero para cubrir sus gastos en la realidad.
Se rumorea que un polizón venerado, conocido como el "Gran sabio", entabló amistad con el legendario Relojero siendo mendigo y ascendió así en la escala social. Sin embargo, es probable que solo se trate de una historia inventada por los contrabandistas de personas para atraer a posibles polizones.

Algunos polizones luchan por adaptarse al paisaje onírico y siguen trabajando en la realidad, en tareas como entregas interestelares o servicios de reparación para naves estelares de paso. Sin embargo, los escasos ingresos que obtienen en la realidad no suelen ser suficientes para vivir en Colonipenal y suelen recurrir ocasionalmente a actividades delictivas, como extorsionar o chantajear a los huéspedes.

Según las leyes establecidas por la familia Roble, el ingreso de polizones está estrictamente prohibido en Colonipenal, ya que suelen enfrentarse a consecuencias graves cuando son apresados por los Sabueso.
Aun así, en comparación con la persecución de La Familia, el daño que causan las bañeras oníricas falsificadas a su cerebro y psique es aún más alarmante. La exposición prolongada a altas concentraciones de memoria sin procesar puede provocar una degradación física y mental muy grave, y muchos polizones sufren trastornos psicológicos que los debilitan en sus últimos años.

Inspeccioné las naves de los polizones a escondidas, pero por desgracia, cuando llegué, un invitado especial muy importante ya había abandonado el barco. Los rumores sugieren que estos polizones enigmáticos tienen recursos financieros significativos y usan bañeras oníricas igual de opulentas que las de la suite platino. Puede que algunos opten por viajar de polizones para ocultar su identidad a La Familia, ya que hasta los criminales más famosos del cosmos pueden alterar fácilmente su apariencia y encontrar refugio en el paisaje onírico de Colonipenal.

Algunos polizones hacen lo imposible por echar un vistazo al paisaje onírico en Colonipenal y partir después en una pequeña nave. Durante una conversación privada, el capitán de una nave estelar de polizones me contó que ellos son la mayoría de sus clientes, ya que sumergirse en el paisaje onírico de esta manera es mucho más rentable que las tarifas exorbitantes que cobra el Hotel Fantasía.

Mientras escribo estas palabras, me maravillo ante el encanto de Colonipenal. Durante varias Eras del Ámbar, este reino de los sueños magnífico atrajo a muchos visitantes y los sumergió en el esplendoroso sueño de la Armonía.

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