Una carta oficial secreta que a primera vista parece una receta, pero al leerla con detenimiento sugiere una conspiración de tortura disfrazada con palabras.
Receta secreta del alafrán
Estimado Sr. Winglum:
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Durante años, Janópolis ha dependido del mirto rosa para recibir las bendiciones de los dioses. Hemos pasado cinco o seis años podando sus ramas y cortando sus raíces. Ahora, este árbol rojo está a punto de colapsar y ha perdido su utilidad, pero sigue intentando extender su copa y ocultar el esplendor de Janópolis. Hemos ideado un plan secreto para talarlo. Un pequeño movimiento durante la ceremonia de bendición, y el mirto caerá al Abismo. La ciudad está construida sobre la montaña, no sería la primera vez que alguien cae por el precipicio.
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En cuanto al próximo árbol sagrado, pensábamos elegir otra marioneta. Sobre la hija del mirto, Trispios... la llamaremos "alafrán". En mi opinión, basta con encontrar cualquier excusa para deshacernos de ella, pero el acólito Códex insiste en prepararla como el próximo árbol sagrado, ya que ha recibido la educación necesaria desde pequeña. Nos ahorraría mucho esfuerzo. En cuanto a su identidad como hija del mirto rosa... aún es muy joven y no tiene alas, si logramos mantenerla confinada, el poder de la profecía se mantendrá en nuestras manos.
Tú y yo sabemos que lo mejor del alafrán es que sirve para cualquier tipo de cocción: hervida, guisada o frita. ¿Acaso no es un excelente ingrediente?