Lista de mala conducta de los guardias de la Doncella Sagrada
Una antigua colección de registros que detallan las conversaciones entre los guardias de la Doncella Sagrada, algunas de las cuales les trajeron serios problemas.

Lista de mala conducta de los guardias de la Doncella Sagrada

Para garantizar que el secreto de la falsa profecía no se divulgue en otras polis, los regentes deben vigilar estrictamente a la Doncella Sagrada y a quienes la rodean, además de tomar precauciones contra cualquier "comentario indiscreto". Se debe prestar especial atención a sus guardias. Estos son algunos ejemplos de conductas inapropiadas:

Caso uno
"La Doncella Sagrada volvió a escaparse; esta vez, por la ventana".

"Descuida. La encontré a la vuelta del vestíbulo. Debe haberse perdido. Bebió algo de leche tibia de cabra y ya se durmió".

"Supongo que esa experiencia fue demasiado para la joven. Pero, francamente, ¿cómo se puede perder la Doncella Sagrada? ¿Acaso la profecía no debería guiarla en la dirección correcta?".

"¿Quién sabe? Quizá a los Titanes del Destino no les importan tales trivialidades. O quizá... Dicen que los Titanes del Destino han estado callados durante mucho tiempo, sin pronunciar nuevas profecías a ningún sacerdote".

"¿Qué? Entonces las profecías que la Doncella Sagrada estuvo diciendo en público... ¿son todas mentira?".

"Quién sabe. Pero yo creo que... ¡ejem, ejem!".

"Oye, ¿estás bien? ¿Qué pasó?".

"¡Idiota! ¡Los regentes nos están mirando!".

Caso dos
"¿Qué quiere la Doncella Sagrada esta vez?".

"Un martillo, arcilla roja, un cuchillo para tallar y dos varas finas de hierro".

"Desafila el cuchillo para que no se lastime. ¿Qué hizo con la última tanda de materiales?".

"Algo difícil de describir: Una cabeza puntiaguda, tres patas y un revestimiento de arcilla roja. ¿Será algún tipo de arma?".

"No, llamarlo juguete tiene más sentido. Si fuera un arma, los regentes no se quedarían de brazos cruzados. No importa la edad que tenga, siempre será una niña a los ojos de los regentes".

"Tal vez ella preferiría ser artesana en vez de Doncella Sagrada".

"Artesana... Eh, si el mundo no estuviera azotado por la marea oscura, su deseo podría hacerse realidad. Pero, en este caos, no tiene sentido soñar".

Caso tres
"¿Cuándo anunciará la Doncella Sagrada el oráculo?".

"...".

"¿Se supone que debemos protegerla del alcance de Castrum Kremnos?".

"...".

"Ah, cierto, anciano, probablemente aún no sabes mi nombre. Yo soy...".

"Yo que tú, cerraría la boca. Ya he pasado por dos compañeros porque no pude callarme. ¿Quieres ver a la Doncella Sagrada? ¡Veamos si puedes aguantar tres meses sin que te manden de vuelta!".

"...".

"Lo siento, eso sonó un poco duro".

"No, no te preocupes... En realidad, no soy de Janópolis. Vivía en Icatus y hace mucho que no vuelvo a casa".

"Y... ¿cómo llegaste hasta aquí?".

"Una hermosa mujer me salvó. Se hacía llamar Doncella Sagrada, aunque ahora es más bien la antigua Doncella. Gracias a ella, me convertí en guardia de la Doncella Sagrada. Es una larga historia, pero déjame que te la cuente con todos los detalles".