"¿No me has escuchado? ¡No vuelvas a ir allí nunca más! ¡¿Se puede aprender algo bueno con un grupo de plebeyos?!".
"Pero nunca he oído hablar de las historias que cuentan de Belobog...".
Se llevó a su hermano detrás de ella, negándole la posibilidad de replicar.
"¡Los dos son Landau! Un día, se enfrentarán a decisiones difíciles. Especialmente tú, Serval".
Sabía que su hermano no había hecho nada malo, pero no se le ocurría nada que replicar.
Se fue a la cama enfadada después de la discusión, prometiéndose a sí misma:
"Algún día seré adulta. Y cuando llegue ese día, yo tomaré las decisiones...".
"Mis propias decisiones...".